Deja De Fumar Por La Salud De Tus Hijos
Quienes todavía no se han decidido a dejarlo, se preguntan, sobre todo, si son padres de niños pequeños, ¿qué pueden hacer ahora para fumar?
"Si en presencia de mis hijos no podía fumar en casa ni el coche y ahora tampoco me deja la ley fumarme un cigarro mientras me tomo un café, ¿dónde fumo?" Se preguntaba una compañera delante de la máquina de café.. Dicen que las ventas en el sector de la hostelería han caído un 30 por ciento y que la picaresca se ha adueñado de la situación, pues con la excusa de salir a fumar, muchos clientes se van sin pagar.
Y es que la prohibición de fumar en algunos lugares públicos va a favor de la salud y en detrimento de la economía. Si eres padre y aún no te has decidido a abandonar el hábito del tabaco, no te pierdas los resultados de este reciente estudio alemán, que ha revelado que los niños cuyos padres fuman tienen la presión arterial más alta. La investigación ha sido llevada a cabo por un grupo de investigadores de la Universidad de Heidelberg en Alemania y del hospital pediátrico de Berna, en Suiza, con niños y niñas de 5 a 6 años de edad, y con uno o dos padres fumadores. El estudio ha revelado que los niños expuestos al humo del tabaco en casa tienen un 21 por ciento más de probabilidades de tener la tensión alta.
¿Qué consecuencias crees que tiene esta subida de la presión arterial sobre la salud de tus hijos? Fundamentalmente, un mayor riesgo de sufrir en la edad adulta enfermedades del sistema circulatorio como ictus o infartos, que pueden poner en peligro su vida. El aumento más significativo fue el correspondiente a la tensión arterial sistólica, la alta, que se incrementa en los niños en una media de 1,0 milímetros de mercurio (mm Hg), mientras que la tensión diastólica, la baja, presenta 0,5 milímetros más.
Exponer a los niños al humo del tabaco es perjudicial para todos y los padres fumadores deben ser conscientes de que el tabaco no les daña sólo a ellos. Los problemas que pueden tener los niños en el futuro debido a la adicción al tabaco de sus padres es una cuestión de responsabilidad y solidaridad. Además de los problemas circulatorios mencionados, hay que recordar el mayor riesgo de infecciones, asma y problemas respiratorios al que están expuestos los niños. El estudio también apunta que, aunque en la muestra eran menos numerosas las madres fumadoras que los padres, éstas tenían un efecto mayor sobre sus hijos, debido a que pasaban más tiempo con ellos en casa. Así que hazlo por tus hijos, deja de fumar.